"Ya me di al poder que mi destino rige,
No me agarro ya de nada, para así no tener nada que defender,
No tengo pensamientos, para así poder ver,
No temo ya a nada, para así poder acordarme de mí,
Sereno y desprendido,
Me dejará el águila pasar a la libertad."
Este es otro blog más acerca de las enseñanzas que Don Juan Matus transmitio a Don Carlos. No pretende ser un manual de brujería, tal y como Don Juan definio la brujería: el procedimiento para limpiar, para desempolvar nuestro vínculo con el intento. En este sentido la palabra brujería se refiere al los medios para realizar el logro de la maestría de ser consciente de ser. Los medios estan al alcance de cualquiera, lo unico necesario es la volundad de poner en práctica estos medios. Además de las enseñanzas de Don Juan, disponemos de otras vías de transmisión acerca de como establecer este vínculo con el intento. Cada cual se sentira más "comodo" con una vía u otra, de igual manera, cada vía conceptualiza el significado de intento con palabras distinctas, que se refieren siempre a lo mismo. ¡¡¡Ojo con las "comodidades"!!! Todas las vías de transmisión del conocimiento están para guiarnos a la misma experiencia, sin embargo "acomodarse" unicamente a una de ella podría compararse al hecho de mirar un paisaje a través del ojo de la cerradura. Todas las vías nos facilitan el medio para salir fuera y formar parte del paisaje; evidentemente no se puede ir por más de una vía a la vez. Solo cabe preguntarnos ¿porque hay tantas sendas espirituales? si todas ellas pretenden llevarnos a la misma experiencia...
Las distinctas vías de transmisión son como naves que nos permiten surcar el vasto oceano de la conciencia de ser, cada una de ellas nos facilita una "visión", una "travesia" desde una perspectiva particular.
En este blog, las enseñanzas de Don Juan Matus, son solo el punto de referencia principal, digamoslo asi: es un faro, de entre otros muchos, para guiarnos, teniendo en cuenta que la esencia de la luz proviene de una y unica fuente. Es solo un metodo y no el unico para llegar a la maestria de ser consciente de ser.
Ver: El todo es más que la suma de las partes - Mis notas brujas
Desempolvar nuestro vínculo con el intento nos lleva a experimentar más alla de la comprensión un conocimiento que sobrepasa todo entendimiento intelectual. No se puede describir con palabras de la misma forma que no se puede transmitir como es un color. ¿Como describir el color azul? Más si somos ciegos. Solo se puede comprobar mediante una experiencia directa, como se degusta el sabor de un pastel o deleitarse con la fragancia de una flor... La palabra agua ni moja ni apaga la sed.
Seis eran los hombres de Indostán, tan dispuestos a aprender, que al Elefante fueron a ver (aunque todos eran ciegos), pensando que mediante la observación su mente podrían satisfacer.
El primero se acercó al elefante, Y cayéndose sobre su ancho y robusto costado,en seguida comenzó a gritar: «¡Santo Dios! ¡El elefante es muy parecido a una pared!»
El segundo, palpando el colmillo, exclamó: -«¡Caramba! ¿Qué es esto tan redondo, liso y afilado? Para mí está muy claro, ¡esta maravilla de elefante es muy parecido a una lanza!»
El tercero se acercó al animal, y tomando entre sus manos la retorcida trompa, valientemente exclamó: «Ya veo,» dijo él, «¡el elefante es muy parecido a una serpiente!»
El sexto tan pronto comenzó a tantear al animal, agarró la oscilante cola que frente a él se encontraba, «Ya veo,» dijo él, «¡el elefante es muy parecido a una cuerda!»
Se ha dicho más arriba que no es un manual para quienes emprenden la aventura de conquistar la maestría de ser consciente de ser. Este es el unico logro imprescindible para experimentar directamente el vínculo con el intento. Si bien se necesita un "codigo de circulación" para aprenderselo y ponerlo en practica, cada cual ha de efectuar la labor de elaborarlo (¿¿¿descubrir???) para y por si mismo, quizás esta labor sea por donde hay que empezar. Es decir emprender la aventura, explorar. Por supuesto que se puede compartir, igualmente se puede indagar en los "manuales" que circurlan en librería, en las redes, o escrituras de otras tradiciones. Nada nuevo se va a descubrir, solamente que "el camino se hace al andar", aunque ya haya quienes lo han transitado antes. Y seguramente que se daran pasos en falso o se tendra que dar marcha atrás, que se tropezara y caera... En este caminar no se esta a salvo de extraviarve, aunque también es posible descubrir atajos, asi es la aventura... emprenderla es un acto de fe.
En todo caso para quienes buscan un escrito de apoyo en el camino al autoconocimiento y relacionado con la obra de Don Carlos, he aqui el enlace de un PDF de uso creativecommons.org; que cada cual lo considere de su utilidad:
También hay que recalcar que el conocimiento al que se refiere Don Juan, indiscutiblemente no es exclusividad de la toltequidad, sino que es universal. Se ha tratado en numerosas tradiciones, en distinctos tiempos y regiones. De este conocimiento han surgido religiones, cultos, ritos, mitos y creencias. Pero lo que realmente importan son las herramientas y las tecnicas para vislumbrar aunque solo sea un destello de este conocimiento, de experimentarlo, saborearlo, deleitarse. Por lo tanto son estas herramientas, estas tecnicas y algunos accesorios los que nos van a facilitar percibir; digamoslo asi, porque no se puede intelectualizar; este conocimiento. Si conseguimos ese primer destello. los pasos siguientes seran permanecer cada vez por más "tiempo" en esta experiencia.
"Un camino es sólo un camino entre cantidades de caminos. Si sientes que no deberías seguirlo no debes seguir en él bajo niguna condición. Para tener esa claridad debes llevar una vida disciplinada. Sólo entonces sabrás que un camino no es nada más que un camino. Pero la decisión de seguir en él o de dejarlo debe estar libre de miedo y de ambición. Mira cada camino de cerca y con intención. Pruébalo tantas veces como consideres necesario. Luego hazte a tí mismo, y a tí solo, una pregunta: ¿tiene corazón este camino?"
Con la intuición viene una alegría particular, diferente al parecer a la alegría iluminada. Ya no es un torrente que parece proceder de afuera, es una especie de reconocimiento (...) Sri Aurobindo decía que la intuición es "un recuerdo de la Verdad". Y en el instante intuitivo se ve claramente, en efecto, que el conocimiento no es un descubrimiento de lo desconocido - no se descubre uno sino a sí mismo, porque no hay nada más que descubrir- sino un lento reconocimiento en el tiempo, de este segundo de Luz que todos hemos visto. ¿Quien no lo ha visto alguna vez? ¿Quién no tiene en la vida ese Recuerdo? Cualesquiera que sean nuestras creencias o nuestra falta de creencias, cualesquiera que sean nuestras capacidades o nuestras limitaciones, nuestras alturas pequeñas o menos pequeñas, siempre hay un instante que es nuestro instante. Vidas hay que no han durado sino un segundo, y todo el resto es olvido.
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